+ Retenedores plásticos transparentes removibles: estos son muy cómodos y estéticos, no se notan cuando los llevas puestos.
Los retenedores removibles son delicados y tienes que quitártelos para comer. Es importante que tengas una cajita especial donde guardarlos, ya que es muy común que se pierdan o se quiebren por almacenarlos en servilletas o bolsitas plásticas. Hay productos especiales que sirven para que puedas mantener tus aparatos limpios y siempre estén como nuevos.
+ Retenedores fijos linguales: estos constan de un alambre que va fijado en la parte posterior de los dientes, son cómodos y no debes preocuparte por estar pendiente de quitártelos o ponértelos. Al tener estos retenedores es importante asistír a tus limpiezas dentales puntualmente, porque a veces pueden acumular placa bacteriana.
Toma en cuenta las recomendaciones, si lo haces, lucirás unos dientes muy lindos, y lo más importante, para toda tu vida.